Calle Francisco Pimentel 3, Col. San Rafael
Ciudad de México
+52 55 5546 9001
info@galeriahilariogalguera.com
Lunes - Sábado: 11:00 -17:00 h
Entrada libre
La Galería Hilario Galguera se complace en presentar Love on the Record la primera exposición individual de Issa Salliander (Suecia, 1984) como artista de la Galería. Dicha muestra, explora los entresijos del cambiante discurso en torno a la narrativa y empoderamiento femenino, a través de un recorrido de piezas que la artista crea con una variedad de medios como la pintura, el dibujo, y la serigrafía.
La Galería Hilario Galguera se complace en presentar Love on the Record la primera exposición individual de Issa Salliander (Suecia, 1984) como artista de la Galería. Dicha muestra, explora los entresijos del cambiante discurso en torno a la narrativa y empoderamiento femenino, a través de un recorrido de piezas que la artista crea con una variedad de medios como la pintura, el dibujo, y la serigrafía.
Galería Hilario Galguera is pleased to present Love on the Record, the first solo exhibition of Issa Salliander (Sweden, 1984) as an artist of the Gallery. This exhibition explores the intricacies of the changing discourse surrounding female narrative and empowerment, through a thought-provoking journey made up by pieces that the artist creates with a variety of media such as painting, drawing, and screen printing.
La obra de Salliander busca transmitir sensaciones contrastantes e incluso contradictorias, rompiendo los límites de la figuración hasta llegar a una abstracción muy personal. Creando así obras absorbentes que hacen referencia a una variedad de temas, desde la cultura pop y la naturaleza, hasta obras y temáticas de distintas etapas artísticas, por ejemplo, el renacimiento y el barroco. Sus pinceladas de oleo gruesas y vívidas retratan temas con dramatismo y humor, concediendo una dualidad en las interpretaciones de su narrativa.
Nacida en Suecia, Salliander ha pasado su vida como una eterna extranjera, viajando constantemente desde su infancia entre Suecia, Asia, Estados Unidos, Reino Unido y México. Esta mezcla de culturas le ha proporcionado una perspectiva de vida forastera, una visión global forjada por una diversa gama de influencias. Esto se traduce en su obra con una constante exploración de dicotomías: este contra oeste, bien contra mal, luz contra oscuridad. Es la tensión entre estos puntos contrastantes lo que más le atrae, una búsqueda constante de la ambigüedad con la que se enfrenta la humanidad en estos tiempos.
Es dentro de esta ambigüedad que las referencias y experiencias personales que con frecuencia se retratan en su obra encuentran una autonomía a través de dobles sentidos, permitiendo una interpretación libre e inédita en cada espectador.
Issa Salliander tiene un MFA de City & Guilds of London Art School. Ha expuesto de manera individual en Galeria Kandlhofer, Viena, Austria; y en OSL Contemporary, Oslo, Noruega. Ha participado en exposiciones colectivas como Faces en Leo Gallery, Shanghai; Kandlhofer Art Collective, Viena; y Parafin Gallery, Londres.
La obra de Salliander busca transmitir sensaciones contrastantes e incluso contradictorias, rompiendo los límites de la figuración hasta llegar a una abstracción muy personal. Creando así obras absorbentes que hacen referencia a una variedad de temas, desde la cultura pop y la naturaleza, hasta obras y temáticas de distintas etapas artísticas, por ejemplo, el renacimiento y el barroco. Sus pinceladas de oleo gruesas y vívidas retratan temas con dramatismo y humor, concediendo una dualidad en las interpretaciones de su narrativa.
Nacida en Suecia, Salliander ha pasado su vida como una eterna extranjera, viajando constantemente desde su infancia entre Suecia, Asia, Estados Unidos, Reino Unido y México. Esta mezcla de culturas le ha proporcionado una perspectiva de vida forastera, una visión global forjada por una diversa gama de influencias. Esto se traduce en su obra con una constante exploración de dicotomías: este contra oeste, bien contra mal, luz contra oscuridad. Es la tensión entre estos puntos contrastantes lo que más le atrae, una búsqueda constante de la ambigüedad con la que se enfrenta la humanidad en estos tiempos.
Es dentro de esta ambigüedad que las referencias y experiencias personales que con frecuencia se retratan en su obra encuentran una autonomía a través de dobles sentidos, permitiendo una interpretación libre e inédita en cada espectador.
Issa Salliander tiene un MFA de City & Guilds of London Art School. Ha expuesto de manera individual en Galeria Kandlhofer, Viena, Austria; y en OSL Contemporary, Oslo, Noruega. Ha participado en exposiciones colectivas como Faces en Leo Gallery, Shanghai; Kandlhofer Art Collective, Viena; y Parafin Gallery, Londres.
El conjunto de obras presentadas, de técnica mixta, muestran la evolución artística de Salliander, presentando por primera vez una serie de pinturas que incorporan la figura humana, acompañadas de su iconografía característica que hace referencia a la naturaleza y la cultura popular.
Lienzos con energéticas pinceladas cubren el espacio de la galería, creando una profundidad visceral y texturizada en cada pieza que desafía las perspectivas convencionales y celebra la fortaleza de la silueta femenina. En el centro se encuentra la activista y modelo, Natalie White, amiga entrañable y musa de Salliander, que encarna la fuerza y la libertad que la artista busca.
Acompañando a Natalie en las obras se encuentran conejos como símbolos, que exponen las dicotomías recurrentes en la obra de Salliander, contrastando el humor y la sensualidad con la vulnerabilidad. Los conejos sobrepasan sus referencias iniciales a la cultura popular, como Playboy (revista para la que White ha modelado), y asumen un papel único, cuestionando la representación histórica de la mujer: vulnerables, pero también resilientes.
La mezcla de técnicas y estilos en las pinturas de Salliander crea una ruptura con el realismo tradicional y se adentra en una abstracción personal, añadiendo tanto subjetividad, como ambigüedad a su obra. La sensualidad del óleo encuentra resonancia con las ilustraciones y la narrativa de la artista, permitiendo que cada espectador encuentre una interpretación divergente tanto del cuerpo desnudo como de sus representaciones zoomórficas.
Love on the Record trasciende su contexto original de un recuerdo íntimo que encarna la amistad, convirtiéndose en una llamada a cuestionar los avances de la igualdad de género. Destacando la doble moral y las expectativas injustas que históricamente se han impuesto a la mujer en la sociedad, donde incluso el cuerpo desnudo implica connotaciones distintas. En el contexto de la historia del arte, la exposición es una exploración singular de la relación musa-artista-musa, en la que el cuerpo de la mujer es reapropiado y presentado desde una perspectiva femenina.
El conjunto de obras presentadas, de técnica mixta, muestran la evolución artística de Salliander, presentando por primera vez una serie de pinturas que incorporan la figura humana, acompañadas de su iconografía característica que hace referencia a la naturaleza y la cultura popular.
Lienzos con energéticas pinceladas cubren el espacio de la galería, creando una profundidad visceral y texturizada en cada pieza que desafía las perspectivas convencionales y celebra la fortaleza de la silueta femenina. En el centro se encuentra la activista y modelo, Natalie White, amiga entrañable y musa de Salliander, que encarna la fuerza y la libertad que la artista busca.
Acompañando a Natalie en las obras se encuentran conejos como símbolos, que exponen las dicotomías recurrentes en la obra de Salliander, contrastando el humor y la sensualidad con la vulnerabilidad. Los conejos sobrepasan sus referencias iniciales a la cultura popular, como Playboy (revista para la que White ha modelado), y asumen un papel único, cuestionando la representación histórica de la mujer: vulnerables, pero también resilientes.
La mezcla de técnicas y estilos en las pinturas de Salliander crea una ruptura con el realismo tradicional y se adentra en una abstracción personal, añadiendo tanto subjetividad, como ambigüedad a su obra. La sensualidad del óleo encuentra resonancia con las ilustraciones y la narrativa de la artista, permitiendo que cada espectador encuentre una interpretación divergente tanto del cuerpo desnudo como de sus representaciones zoomórficas.
Love on the Record trasciende su contexto original de un recuerdo íntimo que encarna la amistad, convirtiéndose en una llamada a cuestionar los avances de la igualdad de género. Destacando la doble moral y las expectativas injustas que históricamente se han impuesto a la mujer en la sociedad, donde incluso el cuerpo desnudo implica connotaciones distintas. En el contexto de la historia del arte, la exposición es una exploración singular de la relación musa-artista-musa, en la que el cuerpo de la mujer es reapropiado y presentado desde una perspectiva femenina.
The exhibition is composed of an array of mixed media artworks, showcasing Salliander’s artistic evolution, presenting for the first time a series of paintings that depict flesh, accompanied by her characteristic iconography that references nature and popular culture.
Canvases with energetic brushstrokes cover the gallery space, creating a visceral, textured depth in each piece that defies conventional perspectives and celebrates the strength of the female silhouette. At its heart is activist and model, Natalie White, Salliander’s close friend and muse, who embodies the strength and freedom that the artist seeks.
Accompanying Natalie in the works are symbolic bunnies, which expose the recurring dichotomies in Salliander’s work, contrasting playfulness and sensuality with vulnerability. The rabbits surpass their initial references to popular culture, such as Playboy (a magazine for which White has modeled), and assume a unique role, questioning the historical representation of women: vulnerable, but also resilient.
The mix of techniques and styles in Salliander’s paintings creates a disruption from traditional realism and delves into a personal abstraction, adding both subjectivity and ambiguity to her work. The sensuality of oil paint finds resonance with the artist’s illustrations and narrative, allowing each viewer to discover a diverging interpretation of both the nude body and her zoomorphic depictions.
Love on the Record transcends its original context of an intimate memory that embodies friendship, becoming a call to question the advances of gender equality. Highlighting the double standards and unfair expectations that have historically been imposed on women in society, where even the naked body implies different connotations. In the context of art history, the exhibition is a unique exploration of the muse-artist-muse relationship, where the female body is re-appropriated and presented from a woman’s perspective.